Por Dayana Abreu Yanes * —¿Cómo desea el solomillo? —me pregunta el camarero. Está de pie, la vista sumida en la pequeña libreta de notas y el bolígrafo listo. Emma enfrente, con una socarronería exasperante, pendiente de todos mis gestos. Acechando. Impaciente, golpea la carta con las uñas, mientras recorre con la vista todo […]